¿CÓMO COMBATIR LA CONTAMINACIÓN PLÁSTICA DESDE LA COMERCIALIZACIÓN DEL CAFÉ?

La contaminación por plásticos es uno de los principales problemas ambientales que sufrimos en todo el Planeta en la actualidad. Cada año llegan a los océanos cerca de 14 millones de toneladas de residuos plásticos, los cuales interactúan con al menos 700 especies marinas ocasionándoles problemas como asfixia, estrangulamiento, inanición intoxicación e incluso la muerte. Por ejemplo, 1 de cada 3 tortugas marinas muere a causa del plástico (Wilcox et al. 2018). Los plásticos que están contaminando los ecosistemas son principalmente los conocidos como plásticos de un solo uso o desechables, como botellas PET, vasos desechables y sus tapas, bolsas de supermercado, envases de productos de limpieza, platos y cubiertos o contenedores de unicel para alimentos, empaques o bolsitas para panes, galletas y golosinas, palitos mezcladores, etc. La clave de su impacto ambiental está en su diseño para usarse por poco tiempo, o pocas veces, y después tirarse.

Como se trata de productos plásticos que están en contacto directo con las personas, por ejemplo los que se usan para alimentos y bebidas, pueden ocasionar también problemas de salud como el riesgo de padecer enfermedades como diversos tipos de cáncer, Parkinson o Alzheimer. Por ejemplo, un equipo de investigación dirigido por la Universidad de Sichuan en China descubrió que beber una sola taza de café para llevar por semana podría exponer a una persona a ingerir más de 90,000 partículas microplásticas cada año (Zhou et al., 2023). Esto ha llevado a que diversos estudios hayan encontrado microplásticos inundando nuestros cuerpos, con presencia en el cerebro humano, heces fecales, orina, tejidos, corazón, placentas de mujeres embarazadas y otros órganos vitales como los pulmones. Esta problemática ambiental y de salud pública exige que tomemos medidas urgentes para evitar el uso de plásticos de un solo uso que están contaminando los ecosistemas y dañando nuestros cuerpos. La solución está en la reutilización.

Cuando hablamos de reutilizables nos referimos a objetos, especialmente con los que ya contamos, hechos con materiales resistentes, no tóxicos, lavables y diseñados para usarse varias veces por más tiempo, como contenedores para alimentos, termos de café, cilindros para agua, bolsas de tela lavables, cubiertos de metal. También, los reutilizables pueden referirse a sistemas de distribución de productos basados en la reutilización, como esquemas de depósito y retorno, como en el caso de botellas o vasos para bebidas como el café que son retornables mediante el pago de importe.
Los beneficios para el medio ambiente de los reutilizables son enormes, ya que contribuyen a reducir significativamente la contaminación.
Las oportunidades para la industria del café en este sentido son muy amplias. Para comenzar, todas las cafeterías que ofrecen servicio para tomar en el lugar deberían ofrecer sus productos en lozas reutilizables en lugar de servir el café y otras bebidas o alimentos en desechables, ya que esto genera residuos innecesarios y fáciles de evitar.

En los casos de pedidos para llevar o en venta a domicilio, como en aplicaciones móviles, las cafeterías y otros negocios que comercializan café deberían permitir a los clientes llevar sus propios termos y contenedores y rellenarlos en el lugar, así como que la misma tienda ofrezca la alternativa de vasos y termos reutilizables con opciones retorno en la misma tienda, en tiendas asociadas u otros puntos de acopio o con los repartidos de alimentos a domicilio.
Un ejemplo de esto último se encuentra en Vytal, una aplicación móvil de renta de contenedores reutilizables a la cual se han afiliado diversos restaurantes y cafeterías de la Ciudad de México, como Hagamos Composta Café, que permite a los clientes comprar sus productos y retornar los contenedores varios días después.
Finalmente, ejemplos como los antes mencionados ya existen y se desarrollan en nuestras ciudades, y los diferentes comercios pueden explorar las posibilidades que estas iniciativas ofrecen si desean contribuir a reducir la contaminación plástica en México.